14 de septiembre de 2014

Alma Errante

Mi Alma Errante vaga a la deriva
buscándote, esperándote, anhelándote,
intentando aferrarme al deseo
de volver a encontrarnos al amanecer.

Somos viejos conocidos de otro mundo,
otra tierra, otro tiempo, otra historia,
compartimos muchas vidas juntos,
días de gloria entre batallas nocturnas.

Mi Alma Errante ahora te busca
para rememorar esos días pasados,
aquellos días donde no había fantasías,
tan sólo tú y yo, complementándonos.

Es por ello que estoy intranquila,
que me desvelo en mitad de la noche,
confundiendo al búho con la alondra,
confundiendo tu risa con la luna.

Mi Alma Errante conserva la esperanza
de pasear de nuevo junto a ti bajo la niebla,
de coger tu mano de terciopelo
para volar juntos hacia el horizonte.

Mientras tanto esta Valquiria te aguardará Dormida
esperando que vuelvas, mi guerrero soñador,
agonizando por no poder reflejarme en tus ojos,
estando a oscuras por faltarme tu luz.



23 de febrero de 2014

Llorar y Volar

     Poco a poco comenzó a batir sus alas y a levantar el vuelo. Era libre. Y lloraba. Y volaba.

Ya no pertenecía más a ese mundo oscuro y tenebroso que la había atrapado durante todos estos años, ahora solo quería danzar bajo el sol. En Libertad.

Todo un futuro y una vida humana, mortal y perecedera se presentaba ante sí para que pudiese volver a ser quién una vez fue: un ser completo y caduco, que disfruta de cada momento porque sabe que puede ser el último. Un ser completo, de luz, que puede llorar, sangrar, morir…
Por fin había encontrado el objetivo de su lucha, por fin habían llegado los frutos de tanto y tanto sacrificio. 

Y sus alas además estaban intactas, como si fueran nuevas. Un pequeño toque de distinción sobre el resto de los mortales, como recuerdo de todo el dolor por el que pasó y como recompensa por la labor bien realizada. Podríamos decir que aquellas alas eran un guiño de los Dioses.




[Continuará…]